el tiempo no perdona, a ninguna persona, ni el hombre al amazonas, tala un árbol y pone una lona, lo juzgan a uno loco, por hablar muy poco, pero claro y directo no me equivoco, y si lo hago lo reconozco, no me gusta ser tosco y si contigo lo fui nimodo te toco, aveces ando ronco por el marlboro rojo, diente por diente ojo por ojo, aveces se ponen rojos, después de que lo forjo, siempre rimo a mi antojo, si llueve pues me mojo y decifro ese cerrojo. con luna llena o cuarto menguante, relajo mis sentidos y purifico la mente, creen que soy arrogante, solo soy diferente, aquí se ponen los guantes, mi gente tiene aguante y siempre está al pendiente,