La noche hace frío como todos los días que no estas, dabas abrazos todos los días hasta que dejaba de llorar, dabas animos para que pudiera superar el vacío en mi. Sufrías en silencio y solo me portaba mal, sabía lo que pasabas pero me había vuelto tan egoísta y tan mierda que solo pensé en mi y en nadie más, me dolía saber lo que te pasaba pero nunca dije nada de eso sabias en el fondo que nunca lo decía en serio pero puse mi granito de arena para volverte fría y aún cuando me encontraste seguía siendo el mismo ser repugnante como siempre me clasificaba yo mismo. Me dijiste que querías alejarte sabía a que te referías ya no sentía ese calor que mandabas debía estar feliz podrías afrontar todo lo demás por tu cuenta, pero entonces porque lloraba cuándo me dabas esos golpes para alejarme. Me sentía frustrado pero no molesto, debía dar el golpe final, si yo quería igual ser así, hasta que te deje ir para siempre. Lloré días y meses, hasta que empecé a dejarme caes en el profundo del vacío...